OS ESCUCHAMOS
Si esperamos y deseamos que nuestros niños usen la lengua con propiedad, fluidez y riqueza, es necesario que le demos la palabra y se la demos confiando en sus capacidades. Aprenderán de lo que escuchan y se relacionarán a través del lenguaje que les enseñemos.
Podemos y debemos hablar a nuestros niños y a nuestros bebés correctamente, siempre caemos erróneamente en hablarles en diminutivos, repetirles y hacer que repitan y repitan conceptos o con tonos exagerados, palabras que no existen y un sinfín de cosas más...
Les hablamos para que puedan comprendernos y para que puedan hablarnos, para poder escucharles y sin ese diálogo el lenguaje no tiene sentido.
Recordad que nuestros bebés y nuestros niños tienen la capacidad innata de comunicarse, de comprender y de dar uso al lenguaje, pero todo ello si existe un vínculo bueno con la persona de referencia, dando vida y significado a su propia palabra.
Otro de los aspectos importantes a tener en cuenta es que debemos ponernos a su altura al hablar y todo lo que nos quieran contar en cada momento es de especial importancia para ellos y así se lo debemos hacer sentir, recordad que si ahora no creemos que lo que nos tengan que decir es importante para ellos carecerá de valor según vayan creciendo y cada vez nos contarán menos cosas, debemos ser su apoyo y acompañarles emocionalmente para cubrir estas necesidades.
A HABLAR se aprende hablando y a DIALOGAR dialogando.