Hace mucho tiempo atrás, Sócrates decía que "El conocimiento empieza en el asombro", ahora decimos como Catherine L´ecuyer que "El asombro es el motor del aprendizaje".
La mesa de luz es uno de los recursos educativos basado en la pedagogía de las escuelas Reggio Emilia. Es un elemento sensorial de exploración que transforma la actividad en una experiencia educativa.
Lo que se consigue con la mesa de luz es crear motivación a través del asombro, de la sorpresa, de la creatividad y curiosidad. Consigue mantener la atención y concentración pero en definitiva, lo que se consigue es que el aprendizaje se convierta en una experiencia divertida en la que los niños exploran.
Algunas cositas que hay que saber es que la edad para poder utilizarla es a partir de los 24 meses, no superar los 20 minutos de exposición y que se debe de hacer con luz natural o artificial, nunca a oscuras.
Os abrimos una ventana a nuestro mundo.
Trabajamos los colores, motricidad fina, nociones...