Por aquel entonces, nuestro mundo no era como lo conocemos ahora. Todo era de COLOR GRIS, las casas, los coches, las personas, incluso el cielo era gris...
Mientras, en el país de las hadas, el color brotaba por todos los lados... ¡Todo era color y alegría!
Sin embargo, existía un hada que se sentía muy apenada por el mundo gris y triste por las personas que allí vivían... IRIS, que así se llamaba el hada, lloraba y soñaba con cruzar el cristal y poder llevar el color y la alegría...
Siete de sus mejores amigas idearon un plan: Con polvo mágico y con sus varitas construirían un puente de un mundo al otro, y así Iris podría cumplir su sueño.
Y así fue como construyeron un ARCO para IRIS, que cuando pudo cruzar al otro lado, era tal su alegría, que lloró de la emoción, y los colores se filtraron por el cristal, el mundo gris se llenó de colores...
Desde aquel día, cada vez que llueve y sale el sol, podemos contemplar el ARCOIRIS de siete colores brillando en el cielo, gracias al poder de nuestras amigas las hadas