Nos hubiera encantado poder ampliar el tiempo y poder realizar alguna actividad conjunta,con los niños y padres dentro del aula, pero debemos respetar el ritmo de cada niño y no todos están preparados para ver a sus padres en el cole solo un ratito y luego despedirse y seguir con las actividades sin alterar su rutina diaria.
Como habéis podido comprobar algunos se han puesto muy contentos al ver a los padres y otros no tanto y se han quedado un poco tristes, pero con unos mimos y la atención de los compañeros y nuestro cariño se pasó rápidamente.